PERÚ (AndeanWire, 28 de Marzo de 2016) Un acto voluntario de amor al prójimo

 Desde los 11 años, Rosario Hidalgo luchó contra la diabetes. Al pasar el tiempo los problemas renales aumentaron. La dependencia a la insulina, medicamentos y diálisis era su nuevo estilo de vida. El trasplante de riñón y páncreas siempre fue su único camino. Posibilidad muy lejana porque la cultura de donación en nuestro país no estaba interiorizada en la población. 

“Era imposible, pero la fe en Dios es lo que realmente me mantuvo aquí. Me dieron la noticia y me designaron como alguien calificado para recibir una donación. En ese entonces tenía 34 años”, afirma. 

Los siguientes dos años en la lista de espera de donantes significaban para Rosario la desesperación y tristeza por los compañeros que iban muriendo porque no eran compatibles o no llegaba su turno. “La ignorancia de las familias de las personas que habían fallecido y se negaban a la donación nos quitaba la esperanza de seguir viviendo”, dice.

Sin embargo, luego que se realizó el trasplante todo cambió. La también enfermera pudo realizar su Serum, y como si fuera un designio de Dios ingresó a trabajar a la Organización Nacional de Donación y Trasplantes (ONDT) del Ministerio de Salud (Minsa) porque necesitaban enfermeras justamente para difundir y promover la donación de órganos. 

“Quién mejor que yo que lo he vivido. La donación es un acto voluntario de amor al prójimo que puede salvar vidas e incluso la de uno mismo”, destaca.

Así volvieron las esperanzas de tener un hogar, y después de tres años de la operación se casó. Fruto de ese amor y con los cuidados médicos respectivos, el 20 de enero de 2016 dio a luz a su primer hijo. 

Son muchos los pacientes que su única esperanza de vida es un trasplante y, desafortunadamente, el número de donantes es críticamente bajo: 2,5 donantes por cada millón de habitantes.

En la actualidad hay aproximadamente 1 251 pacientes en lista de espera de un órgano y tejidos; sin embargo, esta cifra sigue en aumento cada día.

En ese sentido, la ONDT del Minsa invoca a la población a fomentar una cultura de donación para salvar la vida de los pacientes o darles una mejor calidad de vida. Incluso el costo-beneficio que representa la realización de un trasplante, comparado con el mantenimiento de un paciente mediante diálisis por máquinas y tratamientos farmacológicos de reemplazo, no son equiparables.

FUENTE: PERU-MINISTERIO DE SALUD